Los poemas de Ángel Fernández están llenos de imaginación, ternura, ironía y también un punto de crítica. El circo que describe es un lugar mágico y, a veces, un poco extraño. Por eso, pensé que las ilustraciones tenían que moverse en esa misma línea: divertidas, sugerentes, a veces poéticas y otras un poco inquietantes.
Opté por un estilo colorido, expresivo y sencillo. No busqué el realismo, sino transmitir sensaciones. Usé formas planas, contrastes fuertes y composiciones dinámicas que ayudan a que cada escena tenga su propio carácter. Algunos poemas pedían mucha energía (como el del trapecista o el tragasables), otros más silencio o misterio (como el de la sirena o la niña contorsionista). A veces, el dibujo completa lo que el texto apenas insinúa, y otras veces deja espacio para que cada lector imagine lo que falta.
Mi intención es crear imágenes que no compitan con el texto, sino que lo acompañen y le den otra dimensión. Y, sobre todo, que inviten a leer, a mirar, a detenerse y a disfrutar.

Textos: Ángel Fernández
Ilustraciones: Ester Sánchez
ISBN: 978-84-122730-6-9
Ilustraciones: Ester Sánchez
ISBN: 978-84-122730-6-9








